lunes, 16 de mayo de 2022

LA LECTURA DIGITAL

 He tenido la necesidad de salir de libros que he leído y valoro de sobremanera, por un problema de espacio, siendo algunas obras, base de referencias para mis escritos, con la virtud de salvaguardarme, buscándolos en la red, como mecanismo de no perder su rastro y su utilidad. Mi Biblioteca digital es más grande que la física (Que es muy grande en todo caso) y ahora que reparo, leo mucho más en el computador que en el libro físico, las razones son muchas, esbozaré algunas que considero  de mucha importancia.

Leo sin cansarme en la pantalla, puedo abrir más de tres o cuatro libros a la vez, con escribir un nombre o una palabra el PC, me busca las referencias solicitadas, si quiero comprobar o saber del significado de una palabra, la encuentro con suma facilidad e incluso, puedo acudir a otro tipo de significados, como las connotaciones simbólicas o el carácter histórico de la misma, lo que constituye en suma una inmensa caja de herramientas que hacen la lectura más fácil, sobre todo cuando estamos trabajando un ensayo.

Pondré un ejemplo. Siempre he leído al crítico italiano Roberto Calasso o George Steiner. El primero trabajó con juicio la mitología Griega y Romana desde una perspectiva muy particular y como insumo de la literatura, de la crítica. En este caso, la lectura digital y concretamente el PC, me dan todas las referencias a la mano, acudir con facilidad la mitología traída por el autor y en fin tener una lectura completa de sus textos, con todos los recursos necesarios para ir haciendo el trabajo hermenéutico con juicio, gracias a la tecnología. Con Steiner me pasa lo mismo, sus textos son densos y cuando estoy leyéndolo, estas herramientas y referencias me hacen el trabajo más fácil. Solo en el PC, se pueden trabajar estos autores en forma ágil.

De igual manera me pasa cuando leo a Borges, con sus citas. Siempre acudo a realizar con las mismas un trabajo genealógico, casi de arqueología desde una perspectiva estética, la manera como el autor las trabaja para dilucidar con certeza si son ciertas o meros juegos literarios, lo mismo me pasa con las referencias puntuales  a autores y obras, que son muy comunes en sus ensayos o cuentos.

La lectura digital no acabara con el libro físico, pero si cambiará la forma de trabajar un texto de critica literaria, filosófica o histórica. Nos permite tener muchas herramientas a la mano. Otra cosa es la lectura en un texto físico, con la tranquilidad que amerita y sin ninguna pretensión académica. Este tipo de lectura indudablemente continuará vigente y de hecho hoy se venden más libros que nunca, lo que es un alivio para la industria, para escritores y lectores.