lunes, 7 de mayo de 2012

JUAN JOSE HOYOS



En una tertulia espontanea con algunos amigos nos preguntábamos donde están los grandes cronistas de otros tiempos. Colombia ha sido tierra de excelente periodismo escrito, pero inexplicablemente este género parecía mandado a recoger por infinidad de razones.  En la conversación alguien nos refuto vehementemente y nos recordó la obra de este escritor Antioqueño, que es pura crónica.
Juan José Hoyos es un hombre enteramente dedicado al periodismo: Ha ejercido con mucho juicio su profesión desde hace veinticinco años o más. Escribe todos los domingos excelentes columnas, trabaja en la universidad de Antioquía dictando cátedra sobre la materia y ha realizado una tarea única sobre la historia del periodismo.
Lo más relevante sus escritos. Cuando lo leo siempre se me viene a la cabeza el excelente escritor Argentino Osvaldo Soriano, pues encuentro muchas similitudes. Su prosa es impecable. Marianne Ponsford escribió en el prologo de una antología suya llamada “el libro de la vida” con mucho acierto: “Son micro ensayos, cuadros delicados, instantáneas literarias, reflexiones que parten del hombre, pasan por el tamiz de la literatura y retornan al hombre. Son actos de fe en la palabra escrita”.
Sus libros son literatura camuflada de periodismo. Si usted quiere un cuadro vivo de nuestro país, debería leer a Juan José Hoyos. Nuestra tragedia, que es como una herida abierta,  está descrita desde lo más íntimo de su pueblo, desde adentro, atendiendo al ser humano en esencia. Sus crónicas además son como pequeñas notas autobiográficas. Siempre está contando la relación que tuvo con su padre, la que tiene con sus hijos, su experiencia como lector impenitente, las vicisitudes de su barrio, las historias más entrañables de su amada Medellín: del parque, del árbol de su cuadra, de sus amigos y las nostalgias que lo agobian que son muchas.
En un escrito  para la revista el “Malpensante” a propósito de la muerte del poeta Juan Manuel Arango quien fuera su amigo del alma, lo definió de tal manera que parece hecho para describirse a sí mismo: “ no podía entender cómo era posible que existiera una persona como él que era digamos, de cierto punto de vista, “un intelectual” de talla mayor, pero que al mismo tiempo era alguien que no hacía de la inteligencia un oficio insolente, un hombre tocado por la poesía, pero al mismo tiempo una persona común y corriente”.
El mayor elogio a este excelente escritor es decirle que pese a ser una persona en apariencia común, un ciudadano de a pie, tiene la virtud y el arte de trasmitirnos las crónicas relevantes de la vida en primer plano, como si tuviese una cámara, como esas tomas memorables del buen cine.
Su último libro “‘La pasión de contar”, el periodismo narrativo en Colombia', es producto de rastrear tres siglos de historias durante 10 años, con ayuda de estudiantes de periodismo de la universidad de Antioquia.” Así lo reseño el periódico “El tiempo”: Una combinación de paciencia, perseverancia, olfato periodístico, respeto por los que lo precedieron y una obsesión por narrar historias dio como resultado un libro que reúne 115 textos de narradores colombianos, desde el siglo XVII hasta el año 2.000.
Conoce la vida del capo Pablo Escobar como nadie.  Algunas de las buenas crónicas publicadas, son sobre este excéntrico personaje. Sería el mejor biógrafo, pues  siguió su itinerario delincuencial, su vida y tragedia desde mucho antes que fuera  personaje de  talla mundial.




“El libro de la vida” reúne una antología de sus escritos que aconsejo leer. Son frescas, bien escritas y agradables. Son pequeñas historias, llenas de calor humano y siempre atendiendo a lo más elemental de la existencia: Las personas y los hechos que son relevantes en medio de nuestra pesada cotidianidad.
Siempre digo que para un autor el mejor homenaje es leerlo. Son muchas las crónicas de Juan José Hoyos publicadas en la red. A propósito de las inversiones inmensas hechas por las multinacionales para explotar nuestro oro, aconsejaría leer el libro suyo: “El oro y la Sangre” que fue premio planeta. Adelante transcribo una pequeña biografía:


Medellín, 1953


Periodista y escritor egresado de la Universidad de Antioquia. Ha sido corresponsal y enviado especial del periódico El Tiempo, de Bogotá. Fue director y editor de la Revista Universidad de Antioquia. Ha publicado las novelas Tuyo es mi corazón (Planeta, 1984) y El cielo que perdimos (Planeta, 1990). También dos libros de reportajes: Sentir que es un soplo la vida (Editorial Universidad de Antioquia, 1994) y El oro y la sangre (Planeta, 1994). Con este último ganó en 1994 el Premio Nacional de Periodismo Germán Arciniegas. Es coautor del libro Janyama. Un aprendiz de jaibaná (Editorial Universidad de Antioquia, 2002). Ha realizado dos investigaciones sobre el reportaje en Colombia. La primera de ellas se titula Periodismo y literatura: el reportaje en Colombia (inédita). La segunda es Un pionero del reportaje en Colombia. Francisco de Paula Muñoz y El crimen de Aguacatal, (Hombre Nuevo Editores, 2002). En 1987 participó como escritor invitado en el International Writing Program de la Universidad de Iowa (Estados Unidos).Desde 1985 es profesor de periodismo en la Facultad de Comunicaciones de la Universidad de Antioquia. Trabaja como editor en la colección de periodismo de la Editorial de la misma universidad. También es director de la revista de periodismo Folios editada por la Especialización en Periodismo Investigativo de la Universidad de Antioquia. En la actualidad es columnista del periódico El Colombiano, de Medellín.











No hay comentarios: