jueves, 2 de octubre de 2014

MAFALDA MUY PERSONAL


Mi relación con Mafalda ha sido entrañable, me dio una mirada filosófica y contestataria de la sociedad desde una perspectiva muy particular, representa todo lo que pienso de la vida, ella me expresa a cabalidad y para mi época y amigos lo fue todo, hablaba por nosotros con una lucidez sin parangón. Desde que la conocí tengo una amistad de nunca acabar, apasionada diría, espero por bien de la humanidad, poder resolver sus difíciles preguntas, hoy le releo con absoluto asombro, como si fuera la primera vez.
En 1974 tenía apenas catorce años pero vivía abrevando en una generación que luchaba contra el mundo y con todas las formas de vida que se nos imponía. Sólo queríamos la Paz, que los países grandes no se comieran a los chicos y que el esperpento de la guerra no fuera más. Para nada conestábamos con la sociedad de consumo y menos con la presión de las jerarquías sociales, basadas en un arribismo oprobioso. Vivía en mi ciudad natal Bucaramanga Colombia en pleno auge del proceso guerrillero, con un país apenas entrando con alguna fuerza en la modernidad, industrialmente quedado, violento, con una inequidad penosa, socialmente hablando.
El movimiento estudiantil era muy fuerte, la injerencia de los Estados Unidos en nuestros países era absolutamente descarada y sin cortapisas. Un día cualquiera un amigo nos pasó a Mafalda, ese personaje creado por Quino, quien desde ese momento constituyó una especie de guía, nos interpretó y enseñó mucho de lo que hoy nos diferencia del común, con ella aprendimos a pensar los grandes temas de la cotidianidad desde una perspectiva contestaria, pero real, sin sesgos.
“Mafalda es el nombre de una historieta argentina creada por Quino en 1964, cuyo personaje principal es una niña de clase media argentina con una actitud comprometida ante el mundo. Mafalda es una pequeña niña preocupada por la humanidad y la paz mundial, que se rebela contra la manera en que es el mundo, apareció en tiras cómicas en diarios argentinos de 1964 a 1973, y fue también muy popular en Latinoamérica en general, España, Italia, Francia y otros países europeos. Mafalda ha sido traducida a más de treinta idiomas Al comenzar la historieta tiene seis años y en marzo siguiente ingresa al jardín de infantes. A Mafalda le gustan Los Beatles y el Pájaro Loco. Le gusta también jugar en el parque a los vaqueros con sus amigos. Su comida preferida son los panqueques, que le gustan tanto que es capaz de comer sopa —plato que odia— para poder comer este postre. En los diez años de la historieta aparentemente llega hasta el tercer o cuarto grado. Los comentarios y ocurrencias de Mafalda son el espejo de inquietudes sociales y políticas de los años sesenta[1].
Para el grupo de amigos cada tira cómica que se publicaba, era un evento, generaba amplias disertaciones, nos hacía reír, nos ponía a pensar seriamente sobre lo que estaba sucediendo, su reflexión giraba siempre en torno a la guerra, la destrucción del planeta y la sociedad de consumo. Cada pregunta, pues el quid de la tira era hacer preguntas y afirmaciones con hondura, reflexivas, que criticaban al sistema, a los dirigentes, era un cuestionamiento a los adultos de parte de una niña que veía que nada cambiaba.  Mafalda nos interpretaba, con cierto toque de psicoanálisis, lo peor de todo es que sus dudas siguen vigentes, pues nada ha cambiado hasta ahora.
Esta tira cómica, creada por Joaquín Salvador Lavado, apareció por primera vez el 29 de septiembre de 1964, en el semanario argentino primera plana. Quino es un hombre agnóstico, escéptico como su personaje, desesperanzado en lo absoluto,
Tengo una relación muy extraña con Mafalda. Para mí nunca ha dejado de existir y me recuerda a mi barrio, a mis amigos y a una época que nos marcó. Tuve una amiga entrañable, mayte Rosales, que la adoraba, en sus momentos más tristes Mafalda le daba fuerzas para superar esos impases de la vida que creemos imposibles de manejar.
Recordaré cada uno de sus personajes:

MAFALDA
Al comenzar la historieta tiene seis años y en marzo siguiente ingresa al jardín de infantes. A Mafalda le gustan Los Beatles y el Pájaro Loco. Le gusta también jugar en el parque a los vaqueros con sus amigos. Su comida preferida son los panqueques, que le gustan tanto que es capaz de comer sopa —plato que odia— para poder comer este postre. En los diez años de la historieta aparentemente llega hasta el tercer o cuarto grado. Los comentarios y ocurrencias de Mafalda son el espejo de inquietudes sociales y políticas de los años sesenta. Papá Es un empleado público que trabaja en una compañía de seguros (en la era previa a los ordenadores). En una historieta se revela que se llama Tomás. Su afición son las plantas de interior, ya que viven en un apartamento. Conduce el auto familiar que es un Citroen 2CV.
MAMÁ
Es una típica ama de casa argentina de clase media de los años sesenta preocupada hasta la histeria por lo que pasa dentro de su microclima hogareño. En alguna tira se revela que se llama Raquel. Cocina, lava, plancha, hace las compras y (aparentemente) no maneja el auto. Fue a la universidad y abandonó la carrera, y la perspectiva de ser pianista profesional, porque se casó.
FELIPE
Felipe es un niño muy imaginativo y un buen amigo de Mafalda, Manolito, Susanita, Miguelito y Libertad. Va un curso más arriba que ellos. Vive eternamente agobiado por sus tareas escolares y su dificultad para mantener la atención en ellas. Ve la vida de manera más sencilla que Mafalda, más como el niño que es. Le gusta leer tiras cómicas de El Llanero Solitario, le gustan los Beatles, casi tanto como a Mafalda, juega muy bien al ajedrez y muestra interés por una niña llamada Muriel que aparentemente nunca se da cuenta de que él la está mirando.
MANOLITO
Manolito (Manuel Goreiro) es un amigo de Mafalda, Felipe, Susanita y Miguelito, hijo de un comerciante de barrio (el propietario del almacén Don Manolo), y representa a las ideas capitalistas y conservadoras dentro de la historieta, además de ser una caricaturización del inmigrante español. Es el más cabal del grupo, siempre con los pies en la tierra, no deja lugar para la imaginación sino es para imaginarse todo el dinero que ganara cuando sea grande. Físicamente, lleva el pelo cortado a cepillo y tiene la cabeza más cuadrada que los demás. Salvo por el vello facial, se parece mucho a su padre. Su hermano, que aparece en la tira una sola vez y es cuando le dan la baja del servicio militar, trabaja luego en el almacén de su padre. Una de sus características que más llama a atención es que a este personaje le agradaba la inflación que azotaba al país en aquella época. A diferencia del resto de los personajes, a Manolito le gusta la sopa y odia a Los Beatles y toda la moda de los sesenta, tanto como a la competencia del almacén Don Manolo (los otros almacenes). Su mayor sueño es tener una cadena de supermercados (Manolo's) y hacer fundir a Rockefeller.
SUSANITA
Según el libro Viva Mafalda se llama Susana Beatriz, en una tira aparece como Susana Clotilde Chirusi. Susanita es una amiga de Mafalda cuya máxima aspiración es ser madre y tener muchos hijos, asumiendo el rol clásicamente asociado a la mujer. Esto contrasta fuertemente con la actitud de Mafalda, más intelectual y concienzada de la liberación de la mujer y de la igualdad entre sexos. Susanita es una niña muy chismosa y parlanchina, al grado de enfermar a los demás. Nada de lo que pasa en su vecindario ocurre sin que ella se dé cuenta. Físicamente, Susanita es rubia y tiene bucles (tirabuzones), lo que le da un aspecto similar al de su madre. Como ella dice en clase, el futuro perfecto del verbo amar es «hijitos». Sus ideologías son un poco extrañas: prefiere pertenecer a la oligarquía, mantener el poder a un grupo selecto, etc. Se podría decir que es una conservadora. El simple hecho de pensar en Manolito la enferma, el único pasatiempo de ella es pelearse con Manolito cada un «dos por tres» como dijo Mafalda en su segunda historieta, pero muestra interés romántico en Felipe (el cual no es correspondido). Susanita es egoísta, rencorosa y muy modesta con ella cuando sabe perfectamente que lo que habla no es así.
MIGUELITO
Miguelito es un amigo de Mafalda, más pequeño y más inocente que el resto de la pandilla, y también más egocéntrico. Su pelo recuerda a las hojas de una lechuga. Su mayor deseo es que su madre deje de regañarlo por no sacarse las zapatillas para no arruinar el parquet. Sus comentarios se acercan a las ideas autoritarias de un dictador. Su abuelo es un seguidor del Duce y Miguelito se guía por los comentarios de éste. A veces su inocencia contrasta con una espontánea crueldad. Se revela que su nombre completo es Miguel Pitti.
GUILLE
Guille es el hermano pequeño de Mafalda y a pesar de su inocencia le gusta Brigitte Bardot y una vez le gritó a una nube que tuvo la mala educación de taparle el sol. Se caracteriza por hablar con un lenguaje infantil (por ejemplo, en una tira Mafalda trata de corregirlo para que diga «tortuga» y no «todtuga») y tiende a ser algo desfachatado (llama a sus padres «los viejos»). A pesar de ya no estar en edad sigue usando un chupete. La madre estaba embarazada para el golpe de estado en Argentina del general Juan Carlos Onganía en 1966, pero al cerrarse el periódico donde se publicaba la tira (El Mundo), no le dio tiempo a nacer. 
LIBERTAD
Libertad es muy bajita («chiquitita»), al punto que Guille es más alto que ella, y ello es motivo recurrente de comentario, haciendo un obvio guiño político. Es la única mujercita del grupo un poco más liberal que Mafalda, en contraste con los más conservadores Manolito y Susanita. Aspira a que el pueblo tome conciencia de la situación de su país, se levante en una revolución social y cambie las estructuras del país. Su madre es traductora de francés y su padre trabaja en un «puestucho de morondanga» como ella misma lo describe.
BUROCRACIA
Tortuga mascota de Mafalda y Guille, llamada así por la lentitud que tiene para todo. Al igual que Mafalda, odia la sopa, único motivo que en una tira la hizo correr muy rápido, no cabe duda de que su plato favorito conste de una buena hoja de lechuga.

Gracias a su vigencia se consigue toda la tira cómica completa, estudiarla sería una tarea que no solo interpretaría al personaje sino al mundo en su locura, como vemos para nada cambia y es un hecho que cada vez estamos lejos de convivir pacíficamente con nuestros semejantes y con el planeta. Ahora somos consumidores voraces.  
  












[1] http://www.albeos.org/IMG/pdf/Mafalda_tiras.pdf